No alcanzo nunca a entender porque los instantes a tu lado
se me hacen tan perfectos. Un pequeño rato ayer, verte por la mañana, un café
por la tarde… cambian por completo la percepción que tenga hasta entonces de
ese día, me lo alegras por completo. Me devuelves esa sensación agradable que
echo en falta los días que no te puedo ver. No pensé nunca que tan poco tiempo me
diera esa alegría. Parecía mentira, casi un sueño, pero era real, y me
encantaba que fuese así, que con solo verte me sintiera mejor. Ahora lo único
que deseo es tener otro de esos instantes a tu lado, pero mucho más largo, y, a
poder ser, más solos.
0 comentarios:
Publicar un comentario